Martes, 18 de Junio LONG ISLAND, Bahamas
La singladura de hoy ha sido dura. Otra vez doscientas Millas Náuticas y mi resistencia se va debilitando poco a poco. De todas formas, voy a intentar resistir hasta el último minuto. Así lo hicieron los pobladores de Numancia veinte siglos atrás. Las islas son impresionantemente bonitas. Hay mucho tiburón y cada vez que me caigo las paso canutas.. Hoy me he caído violentamente dos veces y gracias a Dios ha funcionado la bomba de achique.. La mar difícil. Mucho viento y olas como paredes que intentan siempre engullirte a traición.. En una violenta embestida, pierdo el control y en dos segundos la "NUMANCIA" y yo nos encontramos sumergidos a varios metros de profundidad. Me asusto mucho. Salgo a flote como puedo y enseguida sale también mi embarcación a la superficie. Las olas son enormes y sopla fuerza siete a ocho. Tengo las muñecas reventadas y el pie derecho con un problema bastante grave: debido al peso, inercias y golpes constantes, se ha producido una gran herida que abarca todo el talón y tobillo. El dolor es muy intenso y a veces se hace insoportable. Especialmente ahora que estoy navegando en una semana lo que tenía previsto hacer en un mes.. Es una pena no poder ir mas despacio y poder disfrutar de este paisaje increíble.
El inconveniente del barco de apoyo ha traído estos problemas con los que no contaba. Al final de la singladura llego a Long Island donde me quedo a hacer noche en Clarence Town.