Viernes, 1.03.02 PALERMO - TRAPANI
Ayer cené con los miembros del club Canotieri Palermo. Tienen cinco medallas olímpicas entre sus miembros. Me entregaron una metopa y un banderín de recuerdo. Yo les he dado la bandera de España y la de nuestra expedición. Muchos hablan orgullosos sobre su origen español. Comentan cariñosamente sobre sus apellidos castellanos; navarros; catalanes; vascos; aragoneses.. Hablan de la España de hace siglos. Nápoles, Sicilia.., Tierras donde nuestra vieja Nación se dejó un alma que se hace bien visible aquí. El objetivo hoy era navegar las 55 millas que separan Palermo de Trapani para luego intentar cruzar a Túnez.
Zarpo a las 14:00 tras revisar todos los equipos y ultimar algún aspecto logístico. Ayer me enfadé un poco porque había desorden en el barco de apoyo y faltaban cosas. Todo el mundo se ha puesto la pila y esta mañana todo estaba muy organizado. Estoy muy contento con el grupo. Están trabajando muy duro y tienen tanta ilusión como yo. La moral está intacta aunque estamos empezando a ver la realidad en toda su crudeza..
Hoy la mar está también mal. Sopla un fuerte siroco del sureste que hace que la navegación sea extremadamente difícil. He llegado a Trápani a las siete. La costa de Sicilia es maravillosa. Grandes acantilados de roca clara, se mezclan con el verde intenso de los escarpados prados. Recuerda mucho a Formentor en Mallorca. Cuando me acerco a costa puedo navegar contra el viento a gran velocidad. Alcanzo los 60 nudos. Me sobrecoge el grito imponente del viento. Eolo se hace notar soplando con fuerza siete. El barco se ha quedado muy rezagado y arribará dos horas mas tarde. Al llegar a puerto, miembros de la Lega Navale Italiana me acogen con todo cariño y me muestran el parte meteorológico desaconsejándome cruzar a Túnez. Hay aviso de temporal y está soplando con fuerza siete arreciando. Les agradezco mucho su interés y les confirmo que les voy a hacer caso. Mejor esperar a intentar cruzar mañana. Son 130 millas a mar abierto y hay que tratar de no asumir riesgos innecesarios. La armada tunecina me ha llamado varias veces a lo largo del día. Quieren esperarme en aguas territoriales de Túnez. Tengo una gran ilusión por llegar a África pronto. Un mundo distinto espera.